La Inspectora Zarco

                   
                                 Zapatillas Voladoras (6)

La mañana está fresca, ronda los siete grados, y hay humedad por el Guadalquivir, no molesta mucho, pero se nota en el ambiente el fresco del rio.

    Zarco se pone en marcha, baja a tomarse un café en la cafetería, va hacia el coche para la línea de salida, a seguir con la investigación.

    8.30 de la mañana, muchos corredores ya en el estadio olímpico, los familiares se quedan fuera y los corredores bajan hacia los sótanos del estadio olímpico, se deja mochila, se preparan, últimos retoques, vaselina, pequeñas mochilas, geles, bebida isotónica. La rutina para algunos, los nervios de última hora para los debutantes.

    Llego a las ocho y algo, bajo cámara y empiezo a fotografiar parejas, grupos, todos sonrientes, alegres por empezar lo que durante tiempo estuvieron preparando. Me voy metiendo hacia la zona donde están los primeros dorsales, con la intención de ver a Dani… Está con un grupo de morenos hablando un perfecto  ingles con ellos, este tío me sorprende cada día.

    - También hablas inglés?. Buenos días, eres una caja de sorpresas!!.

    - Buenos días, coincido con ellos en bastantes carreras, son etíopes y keniatas, se defienden un poco en ingles, como yo mas o menos

    - Que tal estas?, harás buen tiempo?.

    - Saldré a por ello, tengo que entrar entre los 20 primeros, ya sabes.

   - Te animaré para que lo consigas, nos vemos en la meta.

    Seguí haciendo el trabajo, fotos y más fotos, y sin casi darme cuenta empezó la carrera, le dije a Japón que me llevara a la mitad para verle pasar, para ver como se le daba, yo no conocía muy bien Sevilla y el inspector me llevó.

    Ya en la mitad de la carrera al fondo veo que viene el coche del reloj, la policía en moto y los primeros corredores, el grupo de los negros, con algún europeo o español con ellos, van unos diez o doce, y detrás vienen alguno suelto, y a unos minutos viene otro grupo donde viene Dani...

    - Vamos!!, que estas dentro de los 20 primeros!!.

    Me lanza un beso cómplice y un guiño de ojos, me río.... Sigo echando fotos un rato y le digo a Japón me lleve a meta.

    Llegamos a meta y al poco tiempo se empieza a ver los primeros en llegar, vienen los etíopes con los que habló Dani y alguno más detrás...marroquíes..y ya vienen los primeros blancos, voy contando... 13....14... 17.....18...y al fondo le veo ya, con su gran sonrisa y saludando al público, se besa una cruz y entra en meta, al pasar le echo la foto..

    - Que tal he salido?, espero que bien, siempre salgo mal.

    - Soy mala fotógrafa, ya sabes, que tal se te ha dado?. Has entrado el 19.

    - Bien, no sabía más o menos como iba, entonces he cumplido, esta noche cenas conmigo?, me tendré que esperar, creo que he entrado primero de mi categoría.

    - Cumplo lo que prometo, y si te dan premio me espero y te echo foto.

    La carrera va terminando, llegan los más lentos y he echado fotos a todos los que llevaban esa equipacion, aunque lo mismo no es una buena pista. De momento no ha pasado nada ni aquí, ni por ningún sitio, veremos si era buena corazonada.

    Entrega de premios y Dani sube el primero de su categoría, foto y risa cómplice hacia él…se baja y se acerca.

    - Nos vemos a las 20.30 en el restaurante La Giralda, al lado de la casa de mis amigos, no faltes.

    - Allí estaré.

    Llego a esa hora y está esperando en la puerta, me recibe con una gran sonrisa y me da dos besos, al hacerlo me deja un aroma fresco a esencia suave, de las que me gustan paladear. Pasamos al restaurante y está lleno, nos sitúan en una mesa reservada, diría que una de las mejores, se nota le conocen.

    La cena transcurre en un ambiente muy bueno, más distendido, y sueltos los dos, la comida riquísima, y sus risas y las mías, mas las miradas tímidas de él y las mías cada vez más fijas en él, hacen de la cena un rato agradable.

    - Quieres tomar una copa en mi casa, bueno mi casa, la de mis amigos, el servicio no está, le he dado noche libre.

    - Jajaja, muy bueno, osea que estaremos a solas?, lo has preparado bien, eh?

    - Así hablamos más tranquilos, de policía a protegido, o investigado, tengo que contarte cosas.

    Salimos andando hacia la casa y llegamos en nada, estaba a escasos metros, pasamos dentro y nos dirigimos hacia otro salón más pequeño y acogedor, una mesa baja y un sofá aparentemente  cómodo. Prepara unos vasos y me sirve un whisky y él se hace una mezcla con limón, mucho más suave.

    - Tenías todo preparado?, le das libre al servicio, ósea que estabas seguro de que vendría?.

    - Sabía que cumplirías tu promesa, yo te dije que habría cena si entraba entre los 20 primeros, he cumplido, sabía que eras de palabra.

    - Hubiese venido si entras el ultimo.

    - Jajaja... Tengo que contarte algo y que veas algo que tengo. Quiero compartirlo contigo y que lo disfrutemos juntos.