miércoles, 19 de abril de 2017
La Inspectora Zarco
Zapatillas Voladoras (12)
Entra una llamada en el móvil de la inspectora, el teléfono vibra y se mueve sobre la gran mesa del despacho. Zarco presiente de quien es la llamada, una mirada por encima confirma sus presentimientos, es Dani el corredor.
- Hola Dani, cuanto tiempo sin hablar contigo!, que tal va esa aburrida vida?. Me has leído el pensamiento, tenia pensado llamarte, tengo que hacerte unas preguntas.
- Me alegro de escuchar tu voz, y sobre las preguntas si quieres nos vemos, estoy por Madrid, y me las haces mejor en persona.
- Puedes esta tarde?, me vendría bien después de salir de la jefatura, si quieres te recojo y tomamos un café.
- Claro que puedo, y mas contigo. Pasate a recogerme cuando termines, estoy en el piso toda la tarde y no saldré. El piso está en la calle Jorge Juan 16, es el segundo piso.
- Segundo piso, pero que letra?.
- Es solo segundo, es toda la planta, no hay letra.
- Es verdad, se me olvidaba que eras millonario,jajaja, vale, te doy un toque cuando salga.
- Espero tu llamada. Hasta luego.
De un tiempo a esta parte tengo mucha menos comunicación con Dani, ya no juega al triviados ni yo casi tampoco, y por whassaps mucho menos también. Los dos nos centramos en nuestras vidas, y pasan las semanas sin saber el uno del otro. Será agradable el encuentro y ponernos al día, y claro está, saber porqué no estando inscrito corrió en la maratón de Barcelona, algún motivo tendrá.
El día está lluvioso en Madrid y hay un trafico horrible, menos mal que tiene parking en ese piso, porque en esa zona aparcar es misión imposible, con este tío todo son comodidades. Tendrá servicio también aquí?. Que suerte tener la vida resuelta y estar siempre de vacaciones, aunque siempre solo, vamos, eso es lo que creo.
Me meto en Jorge Juan y enseguida llego al 16, bajo por la entrada al parking y busco la plaza. Toda la planta y con plaza de garaje, al alcance de cualquier currito, lo mismo te tiras toda la vida pagando y no lo pagas.
- Creí que no llegaba nunca!, como está el trafico, en cuanto caen cuatro gotas. Menos mal que no he tenido que buscar aparcamiento. Tu no sabrás lo que es buscar aparcamiento, estarás mal acostumbrado ya.
- Mujer, no creas, aquí no, pero tengo que buscar aparcamiento en otros sitios, aunque la verdad siempre me meto a los subterráneos, es verdad, estoy mal acostumbrado, jajajja.
- Me dices donde está el baño, llevo con ganas desde que salí de la jefatura, siempre me pasa igual. Me he traído trabajo para casa, ah!, perdona, que el señor no sabe lo que es eso.
- No seas tan dura conmigo Octavia, lo haría si hiciera falta. El baño está al fondo a la izquierda, como en todos sitios.
El maletín de Octavia queda de pie al lado del gran sofá de piel negro del salón, es de color marrón y muy desgastado. Dani se vuelve curioso y mientras ella va al baño lo abre e investiga adentro. Saca una gran carpeta con documentación, práctica mente es la única, al abrirla y mirar toda la documentación, muchas de las fotos y datos le resultan familiares.
- Bueno, cuéntamelo.....que tal van esas carreras?, al final cual hiciste al final?, que me tienes abandonada, fuiste a Barcelona o a Paris?.
- Pues ninguna de las dos, estaba un poco vago, y así con mas fuerzas correré en Madrid. Y tu que tal con tus casos?.
- Pues, rutina, nada que se salga de lo normal, los delincuentes no descansan, ya sabes. Y por que creo que me estas mintiendo en que no fuiste a Barcelona?, será porque soy policía y noto las mentiras.
- No te miento, no fui a correrla, porque dices eso?.
- Porque te he visto en los vídeos de llegada, estuviste, lo único que no te inscribiste con tu nombre. Me gustaría saber porqué, porque algún motivo tendrás para mentirme.
- Pues todo tiene una explicación. No me apunté a la carrera porque quería correr con el dorsal y nombre de una amigo. Le dediqué la carrera por que se lo prometí hace tiempo y tocaba cumplir mi promesa. Es un amigo que vive en Hospitalet, gran corredor y mejor persona. Hace casi diez años le diagnosticaron esclerosis lateral amiotrofica, y actualmente ya está en silla de ruedas, no se lo que durará, por eso lo hice, lo hice para y por él.
- Vaya, lo siento, sabia que no era normal me mintieras, todo aclarado. Es muy bonito ese gesto.
La tarde/noche transcurrió muy amena entre los dos, se cruzaron muchas miradas y con los vinos y las risas pasó el tiempo sin darme cuenta. Pidió algo para cenar y seguimos hasta casi la medianoche. Dani me pidió que me quedara a dormir allí, pero decliné su oferta, mañana viernes tenía mucho lío a primera hora y prefería ir a dormir a mi casa, ya habrá otro momento mejor.
El caso de los desvanecimientos extraños no avanzaba nada, y tenía la sensación de estar muy cerca de todo lo que rodeaba al caso, como si algo se me escapara. La misma sensación que te dan esas maquinas llenas de peluches, que hay que cogerlos con unas pinzas, que cuando has cogido algo y al subirlo y antes de ponerlo en el cajón siempre se cae.
Con Dani por el contrario me sentía muy agusto siempre, estaba deseando verle, y hoy debía haberme quedado, lo estaba deseando. Será esta faceta mía demasiado fría, o demasiado desconfiada, llevo tantos años en este oficio que llevo todo lo que me rodea en mi terreno personal a lo profesional. Tengo que aprovechar que está en Madrid y quedar con el, si, quiero estar mas tiempo con el.
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